lunes, 27 de marzo de 2017

-30- HACIA EL FINIS TERRAE Y LA COSTA DA MORTE

DIA 30

Hacia el Finis Terrae y la Costa da Morte .

Se une Cabo Silleiro a Finisterre. A este hermano mayor de todos los cabos
… “ El grande, el temido, el fin de la tierra. El que más mete su nariz en este Atlantico majestuoso… se ha unido a sus hermanos pequeños, pues todos son pequeños cree este humilde marino, ante la fuerza de esta punta de tierra. Cabo que ya me pone a ganar E. Ya me pone en casa”
Esto les ponía a los amigos del grupo de was de UNIENDO CABOS . Y  muchos de ellos, conocedores de cabos por el lado de mar y por el lado de tierra, coincidían conmigo.
Las Rías bajas que se van bordeando dejan paso a las Rías altas que a mi particularmente por recogimiento y belleza, por ser mas pequeñas, mas “manejables”, me gustan más . Una parada obligada en Padrón que por otras veces y otras aventuras en ocasiones sobre dos ruedas en lugar de cuatro, es un pueblo querido . Los pueblos de Padrón, Pontedeume, Ferrol, la costa Ártabra que le llaman, le llevan a uno en un rodar suave y lleno de curva y contra-curva hasta el pueblo de Fisterra en este día soleado y de buena temperatura para ser finales de febrero. La playa de la Langosteira, preciosa en su enorme extensión solitaria hoy y preciosa

 
ACERCÁNDOSE A FISTERRA                                       PUEBLO Y MUELLE DE FISTERRA



Las parada aquí es obligada pues recuerdo este puerto con agradecimiento a sus pescadores, gente de mar, mecánico y sobre todo a mi amigo Nicolás, que me dió toda la cobertura necesaria para, desde Vigo, a asistirme en una arribada forzosa con avería mecánica a bordo de mi amado velero. A todos ellos dediqué las fotos del puerto, playa y muelle. Y porque sé que es su costa preferida a un gallego ilustre e ilustrado y a su mujer asturiana; Luis Rios y Josecely

Por la empinada subida que accede al cabo aún se ven algunos peregrinos –pocos- que en un postrer esfuerzo, pretenden quemar entre aquellos riscos, sus botas y sus ropajes cumpliendo así el rito del Medievo .Por supuesto que lo primero que uno se encuentra son señales de prohibición. Prohibido entrar con vehículos si no son para acceder al hotel. Bien, hagamos que vamos al hotel .Prohibido quemar utensilios o hacer fuegos. Bien, pues ya me dirán que hacen las mas de 20 restos de fogatas que he ido viendo. Y es que no hay nada como prohibir para excitar más al prohibido. Aquello de que la manzana prohibida/robada es mas sabrosa y si se coge directa del árbol que no es tuyo, aún más . Ojo, que hablo de una manzana, eh ¡!!!

 
            EN EL CABO Y FARO DEL FIN DE LA TIERRA .  (Mas allá , Dragones...se decía )

  
El acantilado es fuerte y el asomarse con una ligera brisa que lo abraza todo me traslada mentalmente a la mar. A las veces que he doblado este cabo navegando. Una de ellas la que comento más arriba. A vela, sin motor y apurando al máximo la maniobra para, sin ser remolcado, por mis medios, atracar suavemente en el muelle de pescadores, quienes me dejaron estar los dos días necesarios para que llegaran mis amigos con la pieza necesaria y reparar el “hierro”. Dos días más tarde estaba navegando hacia Oporto con Colás de primer oficial. El día soleado y fresco el viento. Con el barco “perita, perita”….. que es como tienen que estar las cosas cuando están bien, según él.

Vamos rodando hacia el norte todavía subiendo por esta Costa da Morte tan temida por los navegantes de los siete mares, pero si cabe más aún por los ingleses que fueron quienes le dieron el funesto nombre. Rafael Lema lo explica bien: ” … no se entiende Europa sin el Finisterre milenario, ni lo que somos sin Europa. Y sin el mar.El Finisterre mítico. Abarca la zona con más naufragios de Europa y el gran cementerio marino del Atlantico, junto al cabo Hatteras. Es pues un viaje físico, costeando la comarca mas brava y bella del Atlantico, y una serie de singladuras al pasado de otros días y otras épocas” -COSTA DA MORTE. Un país de sueños y naufragios . Editorial  GAC3-.

Y no será porque tengan ellos costas suaves y buenos abrigos.

Busco un camping ya muy cerca de Muxía. El que me indican está abierto pero cerrado. Es decir que la cancela está abierta de par en par pero el camping no está abierto hasta la semana santa. De eso me entero después de pitar un par de veces, de llamar y dar vueltas más de quince minutos hasta que viene la pareja que lo regenta, no se si dueños o no y me dice lo anterior: que está cerrado al publico. De buen rollo les digo que poco les costaría  ponerlo ya en el cartel de la carretera pues está a seis kilómetros de la general, y ya por poner, otro en la cancela de la entrada. No les gustó mucho el comentario y por toda contestación… Bueno ya, pero ahora salga que vamos a cerrar la verja . Sin comentarios.

Muxía vive para la pesca cuando la hay y para el turismo cuando viene. Así que como “turista” tuve claro que estaba fuera de temporada . En una cafetería con wifi y generosos enchufes para mi portátil, (la batería cada vez me dura menos ) me apalanqué un par de horas que me resultaron muy provechosas en información. De allí me fui directo después de un par de llamadas de la chica super amable a un albergue particular después de que en el municipal le dijesen a esta mujer que hasta dentro de un mes no abrían.
Fantástico el albergue en el que solo estábamos una alemanona enorme que no hablaba ni papa de español y un italiano trotamundos al que había que mandarle callar. Pero que con sus treinta y pocos años llevaba dando vueltas por el mundo – si, por todo el mundo- desde los 21 . Solo se había impuesto una condición: que no pasaría mas de un año sin que desde el punto del mundo en el que estuviera, viajar a la Toscana para visitar a su madre . Cuando le dije que mi mujer y yo conocíamos aquel pueblo (Siena) y que teníamos amigos allí a los que visitábamos frecuentemente, se levanto de la silla con un sonoro…Mamma mia ¡!!! Y se fundió en un abrazo conmigo. Solo faltaba que el conociera a mis amigos, cosa que ya de resultar sería el colmo de las casualidades . Compartimos los víveres y organizamos una cena de lo mas entretenida . Por supuesto que intercambiamos mails y direcciones y la promesa de vernos… que será cuando él venga a Asturias pues va a ser difícil pillarlo en Italia . Me confesó su intención de seguir viajando hasta cumplir los 50 .
Eran cerca de las 02,30h. de la madrugada cuando ambos nos metíamos en nuestros sacos . La Alemana nos llevaba mucha ventaja.

Os veo por aquí enseguida